Tal día como hoy, 9 de enero, nació la fotógrafa alemano-argentina Annemarie Heinrich, la mayor retratista del siglo XX en Argentina.
Annemarie nació en 1912 en Darmstadt, Alemania.
Su padre Walter Heinrich, era violinista profesional en la ópera de Berlín,
siendo llamado para la guerra como soldado, donde recibió heridas que le
impidieron volver a tocar el violín.
Su familia emigró hacia Argentina en 1926, asentándose en la
pequeña ciudad de Larroque, Provincia de Entre Ríos.
Allí aprendió
fotografía de la mano de su tío Karel.
Cuando su familia se mudó a Villa Ballester, en el Gran Buenos Aires,
Annemarie instaló un cuarto oscuro de fotografía en la casa.
Una vez allí, entra en contacto con el estudio fotográfico de Rita Branger, con
quien aprende las tareas de laboratorio. Paralelamente continúa su aprendizaje
con Melitta Lang y consolida su experiencia en el género del retrato.
En 1930 abrió su propio estudio y se convirtió en fotógrafa
profesional. A partir de esa década, junto con el gran desarrollo que en esa
época tuvo la industria del cine y la radio, tomó fotografías a actrices y
actores y a publicar las mismas en las revistas de espectáculo como: Sintonía, Radiolandia, El
Hogar, entre otras.
Llegó a ser conocida como la inventora de un nuevo género en la Argentina: el
"retrato de famosos".
Heinrich logró valiosos retratos de Eva Perón. Las fotografías que tomó Annemarie Heinrich fueron encargadas cuando Eva Duarte perfilaba su carrera de actriz radial y cinematográfica. Varias de las fotos que le hizo a Evita, volcadas intensamente a la promoción de ella como artista, fueron seleccionadas por los editores para ilustrar las tapas o notas y reportajes en las principales revistas de Buenos Aires dedicadas al espectáculo.
Por esos años, las fotografías de Evita se alternaban entre
el retrato recatado y algunas poses más sueltas. Existen testimonios de Eva
visitando las redacciones y convenciendo a las secretarias para obtener esas
imágenes. Muchas veces lo consiguió. La revista Guión, del 3 de abril de
1940, publicó la foto de Annemarie Heinrich en portada, que la muestra en traje
de baño.
Recordando la sesión en donde se realizó la imagen de Evita con malla de
lunares Annemarie Heinrich señalaba: "La primera vez que la retraté fue
para la revista Sintonía. Me pidieron que le hiciera 'buenas fotos y un
poco sexy, si es posible', algo que no pude hacer porque Eva no era sexy. Era
una piba del interior, muy modesta y simple".
Annemarie hizo del retrato y del desnudo un arte y fue
probablemente la primera que en la Argentina trató la fotografía como arte.
Creó
una forma de presentar a los ídolos del cine, el teatro, la radio o la danza,
idealizándolos al punto de hacer creer que eran perfectos.
En un reportaje en el diario Clarín decía: “Un buen retrato es
algo más que una foto carné. Una cara debe expresar todo lo que un ser humano
tiene dentro de sí, y eso lleva tiempo”.
En el mismo reportaje daba esta notable definición del arte: “La belleza se
aprende mirando. Trabajé toda mi vida mirando un cuerpo, una luz, un reflejo”.
El Desnudo, de 1946, de la colección fotográfica del Museo Nacional
de Bellas Artes fue denunciado en 1991 ante la justicia por “exhibición
obscena”, por estar expuesto en la vidriera de su estudio. El repudio, tanto
nacional como internacional, en nombre de los valores estéticos de la obra y la
trayectoria de su autora, sosegó a la censura.
Fue jurado de la Federación Argentina de Fotografía y del
Foto Club Buenos Aires, y nombrada Honorable Excelencia de la ‘Federation
Internationale de l'Art Photographique’ en 1982.
Obtuvo el Premio Konex - Diploma al Mérito como una de las 5 mejores
fotógrafas de la historia en Argentina.
También le concedieron ser Ciudadana
Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires en 1992.
Falleció a los 93 años en Buenos Aires el 22 de septiembre
de 2005.
Sus fotografías forman parte de la colección permanente del Museo Nacional
de Bellas Artes, del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, del Museo
Nacional de Cine y del Museo Mundial de Tango.
Tenía su estudio en Callao y Las Heras, en el barrio porteño de Recoleta.
Sus hijos, Alicia y Ricardo Sanguinetti, siguen la misma profesión en el mismo
estudio.
Fuente: Wikipedia.
De verdad que era una artista. Menos mal que su familia emigró de Alemania a tiempo
ResponderEliminarMomentos difíciles y convulsos en Europa que obligaron a la emigración, Alí.
EliminarElla supo desarrolllar su talento a través de la fotografía. Por suerte para todos.
Un abrazo, Alí!
Magnificas las creaciones de esta mujer... Transmiten siempre sentimientos e interioridades.
ResponderEliminarBuen trabajo el que nos brindas.
Un abrazo
Una retratista excelente, Ildefonso. Supo sacar lo mejor de sus protagonistas.
EliminarY las fotos de calle no se quedaron atrás, no.
Un abrazo, Ildefonso.
Gracias mi hermano por tu comentario en LA PROPIEDAD. No sabes cuánto representa para mí el hecho de que hayas leído algo tan largo. Gracias de verdad. No he podido responder los comentarios todavía, pero solo te adelanteré que Zweig es mi maestro. Te voy a dejar por acá, un artículo que tiene que ver con él
ResponderEliminarhttps://tigrero-literario.blogspot.com/2011/07/el-deporte-ciencia-en-el-cine-y-la.html
No me ha resultado largo, Alí. Más bien al contrario. Mantiene el interés hasta el final.
EliminarZweig también se encuentra entre mis preferidos.
Un abrazo!!